Activismo Digital
El activismo digital es hoy una piedra angular en todo esfuerzo sostenido para la movilización cívica. Mi trabajo diseña y desarrolla infraestructuras digitales para fortalecer organizaciones y plataformas de activistas y militantes, facilitando la coordinación, el desarrollo de sus miembros, así como su expresión creativa y discurso.
Plataformas Digitales para la Movilización La era digital ha introducido herramientas para potenciar nuestras capacidades organizativas y comunicacionales. Nuestro ámbito de acción física encuentra hoy en el espacio digital apoyo para su potenciación. Una presencia en-línea sólida, es hoy una necesidad crítica. Así vemos como las mejores campañas políticas o cívicas encuentras en las redes sociales sus mensajes más creativos.
De la misma manera, organizaciones sociales de toda índole, se han valido de las plataformas digitales para potenciar sus capacidades y alcance. Para organizaciones como MoveOn.org, o el nuevo partido político europeo Diem25, sus plataformas digitales constituyen el sistema nervioso central.
La arquitectura de estas plataformas digitales es mucho más compleja que meros canales de información. Son herramientas para maximizar el compromiso del activista y respaldar su trabajo. Módulos educativos, eventos en línea, campañas, coordinación de actividades de voluntariado y discusión virtual, forman el núcleo de las actividades que se coordinan a través de las plataformas. El objetivo es potenciar el activismo, atraer nuevos miembros y extender el alcance de las actividades de la organización. Con el tiempo, estas plataformas se desarrollan en una sinfonía de interactividad para sus miembros: foros virtuales, asambleas populares remotas y streaming de eventos en vivo, funcionan como catalizadores para la deliberación democrática.
Estas plataformas rompen además barreras geográficas: permiten la participación de global de activistas y miembros en causas locales. Para organizaciones nucleadas en torno a la militancia climática, cuya acción local tiene impacto global, ha sido fundamental contar con este tipo de herramientas. De la misma manera, organizaciones en países que cuentan con una amplia diáspora, encuentran en estas plataformas un vehículo para conectarse directamente con causas en su país de origen y contribuir directamente con su desarrollo.
En cuanto a activistas, organizadores o ciudadanos comprometidos, en un tiempo en que las causas locales son cada vez más globales, la noción de aprovechar una robusta plataforma de activismo digital pasa de ser un lujo a una necesidad. En una era en la que es posible cuantificar y escrutar cada clic, compartida y “me gusta”, estas plataformas introducen estrategia, eficacia y, principalmente, una cohesión impulsada por un propósito capaz de remodelar movimientos sociales y políticos.
Para estos propósitos, las plataformas de activistas digitales no son simplemente herramientas para la movilización; son ecosistemas que instan a los activistas a pensar de manera expansiva, fomentar el intercambio con otros y posibilitar el pensamiento colectivo para abordar causas comunes. Esta es la nueva cara de la movilización política en la era digital.